Tecnología CAD/CAM (CEREC©)

El proceso de toma de impresión dental: métodos tradicionales vs. digitales

El camino hacia la restauración de un diente ha sido revolucionado por la tecnología. Comprender los diferentes métodos para tomar las medidas de un diente es clave para apreciar los avances en la odontología moderna.

La ventaja digital con la tecnología CEREC©

Una tecnología innovadora asistida por computadora llamada CEREC© permite la reconstrucción precisa de los dientes, a menudo en un solo procedimiento. Este método utiliza escáneres ópticos que capturan impresiones tridimensionales de los dientes utilizando un sistema de cámara. Esto permite modelos digitales inmediatos y precisos, dando tanto al dentista como al paciente la capacidad de visualizar las posiciones generadas por computadora de los nuevos dientes. Con esta tecnología, el paciente puede ver una simulación de cómo se verán sus dientes y evaluar el resultado final del procedimiento incluso antes de que comience. El escaneo de todas las imágenes en la pantalla del dispositivo CEREC permite la creación individual de cada diente según los deseos del paciente. El diseño final es una síntesis de las expectativas del paciente y las recomendaciones profesionales del médico. La apariencia de los dientes y las encías se puede refinar aún más con tratamientos láser adicionales. Todo este proceso, desde el escaneo hasta el diseño e incluso la fabricación, a menudo se puede completar en una sola visita a la clínica dental, brindando una comodidad y precisión excepcionales en el tratamiento estético. Los beneficios clave de este enfoque incluyen:

• Seguridad en los resultados: Los pacientes pueden aprobar el diseño de antemano.
• Eficiencia: El proceso completo a menudo se completa en una sola visita.
• Participación del paciente: Los pacientes pueden codiseñar su nueva sonrisa.

El método convencional: un proceso de varios pasos

El método convencional para tomar medidas dentales requiere varias visitas a la clínica dental. El proceso comienza con la toma de impresiones de las mandíbulas superior e inferior utilizando cubetas de metal o plástico rellenas con un material similar al yeso. Debido a que estas medidas deben ser exactas, a menudo se crea una cubeta personalizada para cada paciente. En una visita posterior, el dentista planifica meticulosamente los detalles finales antes de que se cree un prototipo de la prótesis. Este procedimiento suele requerir un promedio de cuatro a cinco visitas para la planificación, los ajustes y la colocación final. Cuando se utilizan moldes de yeso tradicionales, el resultado final de la prótesis o implante solo se hace visible una vez que ha sido fabricado y está listo para su colocación. Si el resultado no cumple con las expectativas del paciente, la corrección de la prótesis requiere tiempo y recursos adicionales. Además, el éxito de este procedimiento tradicional depende en gran medida de la experiencia del dentista y de la calidad del laboratorio que produce la prótesis. Los errores en la toma de los moldes iniciales pueden dar lugar a una producción incorrecta de la restauración final. La adaptación a las prótesis creadas de esta manera a veces puede dar lugar a complicaciones, como el atrapamiento de alimentos entre los dientes y molestias generales para el paciente.